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lunes, 9 de enero de 2017

Una pluma lírica que embriaga los sentidos Acercamiento a los versos de Luis Alberto Angulo

“Hay un instante
en que todo calla”

Luis Alberto Angulo


David Figueroa González

Poeta Luis Alberto Angulo
La vida nos acerca, como la gravedad que por su naturaleza atrae a las cosas,  así vamos conociendo personas,  algunas veces de manera personal, otras; tenemos la oportunidad de toparnos con sus obras,  pero en ciertos casos,  se  tiene la suerte de conocer la obra y también a sus autores, es ese precisamente  lo que  en estas líneas  que me gustaría resaltar.  Como es el hecho de haber conocido al escritor Luis Alberto Angulo primero  por sus libros y  luego personalmente en la ciudad de  Barinas en una reunión de la Red de Escritores. 
Luis Alberto Angulo,  hombre sencillo y de buen humor, siempre  dispuesto a la tertulia, nos regala en sus escritos una visión  filosófica de la vida y con gran profundidad vital;  incluso desde sus primeros poemas  logramos apreciar esas características  así lo apreciamos en el poema “Distancia”, el mismo pertenece a la antología de la casa sola (1972-1979):

“Uno pasa y no sabe
sobre la vida y el tiempo
Escucha el ala 

jueves, 30 de julio de 2015

ORLANDO PICHARDO, EL DEBATE INTERIOR

David Figueroa González


"Todo viaje empieza con un sueño,
 tu fe  y convicción mostrará el camino"
Grandhi Mallikarjuna Rao


I
La Soledad y El Silencio

“Esta espada con que mido el tiempo
tiene dos cantos
la soledad y el silencio”
 
Orlando Pichardo
Efectivamente, coincido   con que todo viaje comienza como un sueño. Así con esa sensación  partí hacia la Pichardera, hacienda enclavada en el corazón de las montañas de Ospino, estado Portuguesa.  Visita que realicé en 1987 a esas tierras patrimonio de la familia Pichardo. Allí,  entre el verdor natural, los plantíos de café y las orquídeas,  lo que más me impresionó  fue el calor de su familia. Para ese momento  conocí al poeta Orlando Pichardo, hombre de buen carácter  y siempre dispuesto a la conversación amena.
Quizás la magia de aquella finca cafetalera floreció en su ser, llevándolo por los caminos de la contemplación-reflexión, hecho este  que permite que la memoria corra libre en el horizonte de sus versos, corceles que ondean  en su crin la bandera de la   filosofía. El poeta pareciera  despojarse del tiempo  y crea un  discurso sobre su propio pasado el cual no  mira con añoranza, sino como una suerte de ejercicio de introspección que no pretende buscar respuestas existenciales,  más bien  propicia un debate con el lector al acercarlo a sus propias preguntas  y su propia experiencia. De tal manera viajamos a su mundo interior mediante el poema  “La risa de  mi infancia”, texto que se encuentra en  el  libro La palabra que tengo:

martes, 21 de julio de 2015

Un acercamiento al discurso íntimo de María Auxiliadora Álvarez

David Figueroa González

“ Cuando alguien se va, alguien queda.”
Cesar Vallejo
María Auxiliadora Alvarez. Foto Juan Leal
Creo sin temor a equivocarme que casi todos los seres humanos hemos pasado por momentos difíciles en nuestras vidas o han tenido a alguien  cercano a esas circunstancias en las cuales somos un barco en un mar agitado.  Hace dos años más o menos estuve cercano a la guadaña de la parca,  sin embargo logré salir ileso de ese encuentro no deseado. Claro está gracias  al cuidado de un ejército de médicos, enfermeras y por supuesto al amor y presencia de mi familia.
De tal modo que ver la muerte a lo lejos permite hacer cambios en la conducta  o por lo menos hacer el intento, esta visión reflexiva de la existencia permite filosofar sobre la vida, incluso algunos llegan hasta poetizar  la muerte, el dolor y hasta sufrimiento. Uno de estos poetas  es  Cesar Vallejo quien  llevó el  sufrimiento humano al hecho poético   logrando mostrarnos  los estragos impíos del mundo  en la vida del hombre sin perder lo sublime de la creación artística, así lo observamos es este fragmento de Voy a hablar de la esperanza:

jueves, 4 de julio de 2013

Paco Yunque: La simbología del poder

David Figueroa González


“Yo me complazco, en imaginar, en creer en un estado social
en que la alegría sea accesible  a todos”
André Gide

En  mi reciente viaje a Perú, país hermano al cual fui por invitación del grupo Capulí, Vallejo y su Tierra. Me reencontré con la historia todavía viva de lo que fue el Virreinato de España en América, las estructuras  arquitectónicas erguidas  como gigantes enclavados por doquier aún cuentan relatos de tiempos lejanos. Al partir de la capital camino a Santiago de Chuco,  la patria chica de Cesar Vallejo, es más marcada la presencia de estas hermosas estructuras, bien sea, las realizadas por los conquistadores o las elaboradas por el pueblo con su milenaria sabiduría. En el horizonte las montañas evocan los picos de la sierra venezolana y, a pesar de la altitud y el frío, al llegar al poblado las personas con su respeto y cordialidad nos abrigaron el alma.
La humildad característica de las personas que habitan los pueblos andinos está presente en la obra “Paco Yunque”,

martes, 4 de junio de 2013

Poesía: Mágica creación

David Figueroa González

 “Podrá no haber poetas;
pero siempre habrá poesía.”
Gustavo  Bécquer

 
Paul Gauguin (1848-1903) Poemas Bárbaros
Recuerdo una mañana de mi infancia, mis primos y yo nos reunimos en casa de mi abuela con papeles de colores en mano, unos trozos de cañas y unas tiras de trapo viejo, hicimos un papagayo.  El viento barría las nubes dejando el cielo limpio con un espléndido sol. La brisa no dejaba de jugar  y nuestro papagayo se elevaba muy alto.  La cometa  subía y subía impulsado por breves tirones que dábamos al hilo; así se  iba alejando y ella alegre serpenteaba en el aire equilibrando su peso. Cuando llegó al punto más alto, desde donde nos enviaba mensajes de libertad,  el  cordel se reventó  y nuestro papagayo se fue libre, hasta que  la vimos caer inocentemente tras los árboles de otra casa. No pudimos recuperarla y tal vez lloramos por el sueño perdido.

viernes, 15 de marzo de 2013

Cuando la palabra se hace vino

David Figueroa González



“Mi corazón es un vaso de vino
                     bébeme   
                        embriágate
quiero sentir tu corazón borracho…”
Lydda Franco Farías

No más vino. Angel María Cortellini Hernández.
Desde siempre he mantenido una relación muy estrecha con el entorno cultural, cuando pequeño eran mis padres que  me llevaban a los recitales poéticos, al teatro, a los conciertos de música clásica, para mí era adentrarme en un mundo fantástico donde hasta los absurdos eran posible; recuerdo mi primera visita al teatro la historia se basaba sobre un ave enamorada de una princesa y como lloraba todas las noches,  la luna cual madre llena de misericordia le regaló una caja mágica en la cual el ave entró y para sorpresa de todos los presente  salió convertida en hombre. El juego de luces, el sonido y la niebla del escenario me llevaron a estar en ese extraordinario mundo, al punto que cuando la función llegó a su fin, le pedí a mi papá que me montase en el escenario para ver y tocar esa fabulosa caja mágica.

martes, 4 de diciembre de 2012

Imaginación y ludismo: corceles que cabalgan en la literatura Infantil

      
David Figueroa González



"En cuanto a la poesía, la infancia
es el terreno más propicio para sembrar."

Morita Carrillo.


Hay pasajes que llaman sin nuestra autorización a la  melancolía, como por ejemplo cuando hace poco visité un Haras con mi esposa, fuimos a la subasta anual de sus purasangre y  a medida que realizábamos el recorrido quedamos atrapados por  la estampa de esos animales, en tanto, y sin notarlo una perla indiscreta se escapó corriendo por mis mejillas, lágrima hija del recuerdo, recuerdo que evocaba  mi querido caballo Pinto. Con él recorrí varias veces la hacienda de mi abuelo, con él desfilé en la feria e incluso  fui coleador.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Un viaje a nuestra infancia desde la tinta invisible y otras historias

David Figueroa González

“De pronto me disfrazo con el silencio
de un escondite que está y no está”
Carlos  Ildemar Pérez

Desde siempre he sentido admiración especial por la  literatura infantil. Mis primeros pasos como lector estuvieron impregnados  de esas obras, recuerdo “La edad de oro” de El apóstol José Martí,  la  simpática “Rizos de oro y los tres osos” del escritor ingles  Tony Ross o  los inocentes hermanitos  Hansel y Gretel, historias recopiladas por los  hermanos Grimm. Me llena de