Juan
Rulfo
Desgraciadamente
yo no tuve quién me contara cuentos; en nuestro pueblo la gente es
cerrada, sí, completamente, uno es un extranjero ahí. Están ellos
platicando; se sientan en sus equipajes en las tardes a contarse
historias y esas cosas; pero en cuanto uno llega, se quedan callados
o empiezan a hablar del tiempo: “hoy parece que por ahí vienen las
nubes…”. En fin, yo no tuve esa fortuna de oír a los mayores
contar historias: por ello me vi obligado a inventarlas y creo yo
que, precisamente, uno de los principios de la creación literaria es
la invención, la imaginación. Somos mentirosos; todo escritor que
crea es un mentiroso, la literatura es mentira; pero de esa mentira
sale una recreación de la realidad; recrear la realidad es, pues,
uno de los principios fundamentales de la creación.