jueves, 22 de agosto de 2013

Habitar el sonido


Rodolfo Castro

 
El texto escrito yace inerte e inexpresivo ante nuestros ojos. No hay nada vivo allí, sólo rasgos apagados, un intento por existir, un libro, las paredes de arcilla de una olla vacía. El texto escrito es un recipiente. Eso que no es el libro es la lectura. Leer es caer al vacío, ingresar en ese espacio por propia voluntad y en ese acto otorgarle al libro su esencia, su razón de existir: ser leído, ser un sitio habitable.
Si la lectura en cualquiera de sus formas es un ente intangible, la lectura en voz alta demanda un acto de creación: una ilusión sonora que pueda ser vista.

viernes, 9 de agosto de 2013

Los niños de la calle en la obra de Monica Zak


Víctor Montoya

Monica Zak confesó que la idea de escribir este libro empezó a principios del 2002, en la capital de Honduras, donde conoció a un niño de la calle, cuya vida insólita, en compañía de dos perros vagabundos, la impactó tanto que, sin pensar dos veces, decidió acercarse a la realidad de los niños andariegos de la limosna; una experiencia que duró dos meses y constituyó el tema central de “Alex Dogboy”. Lo interesante es que no todo terminó en este libro, ya que su obsesión por el tema, como ya le había ocurrido en otras ocasiones, con otros libros y otros temas, la impulsó a escribir la continuación bajo el título de “Tredje kärleken” (El tercer amor), un libro aún inédito en nuestra lengua. 
Monica Zak, con pasión y estilo depurado, combina los métodos del periodista acucioso con el talento del narrador que sabe manejar el hilo sutil de la imaginación y la realidad a la hora de tejer el texto y el contexto de su obra, con personajes y situaciones que existen y respiran cerca de nosotros; por eso mismo, el libro “Alex Dogboy”, lejos de toda consideración tendenciosa, es una obra que pertenece al llamado realismo social, que sigue teniendo tanto cultores como lectores en este nuevo milenio.