jueves, 31 de enero de 2013

Plagios


Carlos Yusti

Si uno hubiese tenido talento quizá habría comenzado en esto de la literatura como poeta maldito. O sea un geniecillo precoz con la navaja de la metáfora nueva dispuesto a acuchillarlo todo. No obstante uno va a la literatura sin saber bien en que embrollo se mete y sin sopesar la falta de preparación.   Cuando se empieza a escribir uno se asemeja a esos boxeadores sin piernas y ni cerebro.  Las razones para escribir, tan insondables como las razones para no escribir, te empujan de manera automática.  Como carecía de talento y lectura comencé como plagiario.  Además los Rimbaud se dan en la vida de manera esporádica. Escribir una obra literaria paradigma a los 21 años, enamorarse de otro poeta, sentar a la belleza en las rodillas e injuriarla y luego irse a comerciar con armas y esclavos en Abisinia no era mi ideal.  Tenía para ese entonces 14 años y leía mucho a Quiroga.  Quería escribir cuentos

lunes, 21 de enero de 2013

Alicia en el mundo imaginario de Lewis Carroll

Víctor Montoya

“Alicia en el país de las maravillas”, sin lugar a dudas, es una de las obras fantásticas del siglo XIX, no sólo por su brillante prosa análoga a la poesía, sino también porque echó por tierra la literatura didáctica y moralista de su época, para dar paso a la imaginación y la alegría sobre la  base de una lógica que no es una realidad sino un sueño dirigido. En esta obra, como en las historias de brujas, hechiceros, fantasmas o hadas, se ensamblan la realidad y la fantasía con todo el fulgor de su belleza.
Lewis Carroll contó una historia cuyo personaje vive aventuras fantásticas a partir de la realidad. Alicia, la protagonista, es una niña semejante a las niñas reales, pero que en la historia,

sábado, 12 de enero de 2013

¿POR QUÉ SE ESCRIBEN LIBROS INFANTILES?

Astrid Lindgren.
Traducción Víctor Montoya


¿Por qué escribes sólo libros infantiles? Ésta es una pregunta que se me hizo muchas veces. La respuesta más simple es decirles la verdad: porque esto es lo único que sé hacer. No tengo la capacidad ni el deseo de escribir para adultos. Lo que la gente parece no entender es que se trata de dos tipos de escritores diferentes; aquellos que escriben para los adultos y aquellos que escriben para los niños. También existen quienes hacen ambas cosas, pero no son tantos como se cree. Pues no siempre un "escritor para adultos",